miércoles, 27 de junio de 2012

La actitud psicológica frente al estudio



Por: Lic. Pamela Obregón Carrera
COACH ONTOLOGICO
Psicóloga
 
Llamamos actitud psicológica al estado de ánimo del joven respecto al estudio; es lo que sientes antes, durante y después de estudiar. Si la actitud psicológica es negativa, el joven va a vivir en una permanente guerra con el rol de estudiante que hay dentro de él, y ambos, el joven y el rol de estudiante, que como comprenderás son la misma persona, van a salir perjudicados. Y entre víctimas adicionales debemos contar, también a su rol de hijo, al rol de hermano, al rol de amigo, etc. que existe en su interior. Para que tantos roles y funciones del joven, no sufran por el mal desempeño de una de ellas – la del rol del estudiante – te recomendamos adoptar una actitud psicológica verdaderamente favorable al estudio.

Es por eso que te recomendamos:

1. Metas, objetivos y proyectos definidos: Esta es la primera actitud psicológica que tienes que desarrollar. Tu vida tiene que apuntar hacia algún destino que tú mismo hayas elegido.
2. El interés: Sentir el máximo interés por el estudio, y este interés debe ser doble; primero es sentir interés por observar que resultado te da aplicar los consejos que te damos y segundo por encontrar la mayor sensación de aplicación novedosa de tus cursos, no descartes juegos mentales de suma y resta, competencias entre compañeros, etc.
3. El entusiasmo: Si bien el interés te permitirá aprobar el año, el entusiasmo te llevará a ser realmente bueno en tu aula y en la vida. El entusiasmo es la máxima aspiración que debes fijarte en lo que respecta a actitudes psicológicas frente al estudio y sus síntomas son:
a. Cuando estudias una materia determinada y te quedas con la sensación de que no te basta con lo aprendido y que quieres saber más.
b. Cuando entras a internet y buscas los temas de clase que te quedaron inconclusos o buscas tener conversaciones con tus profesores o amigos sobre dichos temas.
4. La voluntad: Es la capacidad de cumplir con lo que te has propuesto realizar, es tu determinación interior que aprenderás a desarrollar paso a paso, así tengas múltiples “tentaciones” para abandonar tu objetivo; ya sea el cansancio, fiestas, tv, etc. Esto no significa que debes eliminar esos elementos de tu vida, precisamente; a base de voluntad cumplirás tus horarios a la perfección para poder darte tiempo para todas estas cosas.
5. La perseverancia: La voluntad te predispone cumplir tus metas, pero la perseverancia te llena de energía para sostener tu palabra en acción. Ten cuidado pues la perseverancia te puede llevar también a su lado oscuro que es la terquedad, que se traduce en “Yo estudio para que no piensen en mi casa que soy un tonto, “Sacaré buenas notas para que mi papá me compre lo que yo quiero en navidad”, entre otras cosas. La perseverancia está orientada a saber que tu meta es racional, coherente y te define como persona, la perseverancia te llena de flexibilidad de saber que si aprendes es para ti y por tu propio bienestar y tu realización como persona.
6. La confianza: Si bien perseveraste en tus acciones, es evidente que el estudiante se enfrenta a situaciones duales, aprendes o no aprendes; ingresas o no ingresas; etc. Si tú no tienes confianza te empiezas a visualizar como un posible perdedor y entonces todo lo anterior no tiene sentido ¿No? Es por eso que si eres consciente que te dedicas al estudio, le pones empeño y sabes en el fondo de ti que estás dando lo mejor, no tienes porque preocuparte. ¡Confía en tì mismo y has la diferencia!
7. La serenidad: Es el estado de ánimo que deviene de la confianza, se genera por el convencimiento que tú posees de que las cosas irán bien. Sus síntomas son:
a. No demuestras impaciencia, tus movimientos son seguros.
b. Tu musculatura se encuentra relajada, no aprieta la mandíbula inferior constantemente.
c. Tu voz es clara y firme, no hablas atropelladamente y tampoco pausadamente.
d. No aparentas estar agitado, tu ritmo de sudoración y tus latidos de tu corazón son normales.
e. Duermes sin necesidad de pastillas, no te levantas adolorido en las mañanas.
8. La satisfacción: Detrás de cada esfuerzo humano glorioso, hay una persona que ha disfrutado con su trabajo. La satisfacción es el síntoma que estas avanzando, creando y realizando, como reacción te impulsa a seguir adelante. Y recuerda que también el estudio debe ser disfrutado en toda la expresión de la palabra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario